"Mañana será un día histórico", así afirman desde todos los sectores sindicales, organizaciones sociales, movimientos de mujeres, grupo feministas y autoconvocadas. Luego de un primer ensayo de paro de media jornada en octubre del años pasado, Argentina se convirtió en un país antecedente junto a Polonia, Corea, Rusia y Estados Unidos de lo que será mañana el Paro Internacional de Mujeres.
A dos días de esta fecha, se sumaron otros cinco países europeos y asiáticos al paro, casi la totalidad del continente americano se une al paro. En Argentina, cada provincia y cada ciudad se preparan entre asambleas, intervenciones, desde preparativos entre grupas de pares y redes intersectoriales.
Como destacó la investigadora en géneros y TIC, Claudia Laudano, en su artículo Entre asambleas y redes sociales se construye el paro, la incidencia a nivel internacional, nacional y local abarca desde reuniones precisas, hasta últimas asambleas, tendencias en Facebook y Twitter y discusiones vía Skype o WhatsApp.
El movimiento no para, el lunes el casco céntrico de Resistencia amaneció empapelada con mensajes con el lema “Nosotras paramos”. Los mensajes del #8M abarcan las realidades trans, los femicidios, el aborto y una mención especial a la homofobia y lesbofobia a través del caso de “Higui”, una mujer lesbiana presa por defenderse de sus violadores.
Mañana, a estos datos estadísticos se sumarán temas históricos, como “la precarización laboral, el fin de los femicidios con medidas y presupuesto acorde, el reconocimiento y la redistribución de los trabajos domésticos no remunerados, el desmantelamiento de las redes de trata de mujeres y chicas para explotación sexual, la aprobación del proyecto de ley por el aborto legal, entre otros, junto a la disputa política frente a la actual coyuntura que en términos generales torna palpable la pérdida de derechos conquistados”, detalló Laudano en su publicación de Notas.org. En Chaco, se adhirieron a estos pedidos y se agregaron otros específicos como el derecho de niñas y adolescentes sobre todo ligado a las altas tasas de embarazo en menores, el cupo laboral trans presentado en la legislatura provincial, y la situación de mujeres rurales y de pueblos originarios, entre otros.
En el contexto nacional, además el paro de mujeres se unió transversalmente a una semana de luchas que inició con las y los docentes, centrales trabajadoras y terminará el viernes con un ruidazo. “Tortillera docente enseña a luchar en las calles”, se leyó en la marcha por la educación ayer y no fue inocente, días atrás se conoció públicamente la discriminación a una docente por su orientación sexual. Así es que se suman fuertemente la responsabilidad del movimiento de mujeres en alzar la voz por las persecuciones políticas, la política neoliberales, la feminización de la pobreza en un contexto de despidos e inflación. Milagro Sala, a pesar de las diferencias, será clave en la marcha, junto a todas las víctimas que ya no están y las que aún reclaman justicia.
Desde las 9, en los centros de cada ciudad, las mujeres se preparan. El Mástil Mayor de la avenida 9 de Julio de Resistencia espera recibir a cientos de mujeres.
PERSECUCIÓN POLICIAL
A 24 horas del paro, circuló entre las redes de mujeres otra prueba más de la persecución policial. Detuvieron a seis integrantes del colectivo Ni Una Menos mientras realizaban pintadas convocando al 8 de marzo en Buenos Aires.
Hasta el momento, según informaron desde sus cuentas oficiales, se encuentran en la comisaría 9° acusadas del delito de daño. “Fueron denunciadas y perseguidos por tres varones. El operativo policial fue desmedido: contamos diez policías, tres patrulleros y una moto policial por tres mujeres desarmadas”, manifestaron. Si bien el martes al mediodía tendrían la audiencia para ser liberadas o no, resaltaron desde el colectivo que “los mecanismos de la justicia patriarcal funcionan con celeridad cuando se trata de perseguirnos, pero nunca para defendernos. El #8M nos encontramos en las calles”. Desde el grupo Ni Una Menos Resistencia, se unieron a la denuncia pública y al acompañamiento a estas seis mujeres.
