Los trabajadores de la planta de Pampero radicada en Fontana, que anunció el cierre de sus puertas esta semana, analizarán la oferta del pago de lo adeudado en tres cuotas que realizó el representante de la empresa en la reunión mantenida hoy en la Casa de Gobierno. El martes podrían firmar un acuerdo que, entienden, significaría el primer paso en la definición de su situación laboral.
El encuentro se realizó ayer en el tercer piso la de Casa de Gobierno y se extendió hasta después del mediodía. Participaron del cónclave el subsecretario de Trabajo, Darío Trangoni; Cecilia Meza, de la Dirección Provincial del Trabajo; Walter Pérez, abogado de La Taninera S. A., dueña del emprendimiento en Fontana; representantes del Sindicato Obrero de la Industria del Vestido y Afines (SOIVA) y los trabajadores de la planta representados por Lidia Bernal, entre otros.
Si bien la intención a priori era lograr el llamado a conciliación obligatoria por parte de la Dirección Provincial del Trabajo, esa posibilidad se descartó ante la aparición de la oferta que podría encauzar el conflicto. En rigor, no es lo que esperaban los trabajadores, quienes pretendían cobrar la totalidad de lo adeudado, pero ante el confuso escenario y la incertidumbre por cómo puede decantar el conflicto, los trabajadores decidieron analizarla en profundidad.
Según pudo saber este matutino, algunos trabajadores valoraron el hecho de que se concretara el ofrecimiento y se mostraron dispuestos a firmar ayer pero decidieron tomarse el fin de semana para expresar una respuesta que represente la opinión de la mayoría.
A pesar de esta posibilidad de acuerdo, lo que no cambia, en principio, es el destino de la planta: según comentaron fuentes que participaron de la reunión, la única posibilidad de continuidad sería la aparición de una empresa que absorba los costos de producción y garantice la continuidad de las fuentes laborales, cosa que por estas horas parece una utopía.
Algunos trabajadores analizan en ese sentido la opción de conformar una cooperativa o emprendimiento similar que pueda sostener los puestos o la mayoría de ellos, pero esta idea no es compartida por la totalidad de los 37 trabajadores que perderán sus empleos cuando termine el proceso iniciado por la empresa. “La prioridad pasa hoy por asegurarnos el pago de lo adeudado y después seguiremos analizando cómo seguir”, apuntó Bernal ante la consulta de elDIARIO de la Región.
La referente de los trabajadores admitió además: “La propuesta no es la que esperábamos, porque nos dejan sin trabajo y ahora nos quieren pagar en cómodas cuotas, pero de todas maneras vamos a analizar bien la propuesta y tomaremos una decisión el martes”.
De concretarse el acuerdo, el personal cobraría el mismo martes dos cuotas correspondientes a dos salarios, y el resto se abonaría en cheques a 30 y 60 días, para cancelar las deudas.
