A lo largo de cuatro noches, desde el jueves hasta ayer, se llevó a cabo la edición número 11 del clásico festival de cine. En esta ocasión se pudo retomar el evento de manera completamente presencial, a diferencia del 2020 que las personas tuvieron la opción de ir a ver los cortos, pero en autos particulares para evitar el contacto entre personas.
Para conocer lo que representa el Guácaras, en diálogo con elDIARIO de la Región el fundador del evento y director de cine, Marcel Czombos, declaró que “para nosotros es una fiesta llegar a la 11° edición, nuestro objetivo siempre es la gente, que pueda disfrutar de las producciones audiovisuales que se producen acá, que disfruten de la calidad que tienen”.
Además, sostuvo que uno de los principales objetivos es “poder mostrar primero a nuestra gente y después validar. El Guácaras se convirtió en un gran validador de cada producto audiovisual, ya que una vez que pasa por el Guácaras ya es un premio haber sido seleccionado”.
Este festival piensa de manera inclusiva en los y las espectadores, ya que son denominados como “Guacarador” (Guácara/espectador). Ellos se convierten en jurado de cada una de las competencias ya que son los que eligen a los ganadores.
En cuanto al factor organización, el director del festival afirmó que “está todo encarado desde la comodidad, de que haya una pantalla extraordinaria, de que se puedan ver los materiales con la mejor calidad, en que haya un buen sonido, en que estén cómodos y la pasen bien al aire libre cuidándonos mucho con respecto a la pandemia”.
Inclusive, dentro del predio del evento, los espectadores contaban con el acceso a “La Guantina”, un punto gastronómico exclusivo del Guácaras, donde se podían adquirir bebidas y comidas, y de esta forma ayudar a la producción del festival. En relación al acceso, durante los cuatro días que duró el evento las personas interesadas en asistir tuvieron la chance de acceder a un colectivo gratuito puesto por el municipio de Corrientes. El mismo salía desde el puerto a las 19 y volvía a las 00:30 una vez terminado el evento.
Por su parte, el presidente del Instituto de Cultura de Corrientes, Gabriel Romero, en relación al masivo evento indicó a elDIARIO de la Región “quiero felicitar a todo el equipo de Guácaras por estos 11 años llevando adelante un proyecto de estas características, muy importante por el esfuerzo, el tesón, a la capacidad de gestión”. Además, sostuvo que “desde el gobierno Provincial acompañamos a lo largo de estos 11 años, con un gran compromiso con este festival”.
PREMIOS
Por primer año el evento entregó un premio a la competencia secundaria que consta de un parlante bluetooth con micrófono. Cabe destacar que las instituciones actualmente utilizan esta herramienta con mucha regularidad, por lo que el premio ayuda a fortalecer la enseñanza secundaria. En este caso, el corto ganador fue “El Pombero en la escuela” de Nicolás Escobar.
En cuanto a la competencia universitaria, la misma consta de cortos audiovisuales producidos en el ámbito universitario. El corto ganador -elegido por los Guácaradores- fue “Malvinas, El legado” de Jonathan Martínez Campos, quien accede a un premio de $50.000. Pero no solo eso, también por ser ganador participa en el premio Cine.ar Play que es la plataforma del cine argentino que incluye un premio de adquisición por $35.000.
Y, por último, se encuentra la competencia oficial que contiene cortos tanto de Argentina, como de Brasil y Paraguay. En este caso, el Instituto de Cultura brinda un premio al corto ganador de $50.000, cuyo ganador fue “Escarq” de Nahuel Fontán.
EL OTRO GUÁCARAS
Se realizó en el Penal N°1 que se enmarcó como la primera actividad que realiza el nuevo penal con el exterior. El mismo cuenta con la proyección de cortos audiovisuales para que los internos puedan elegir el que consideran ganador. “Saishet Ra Sashenaq” de Constanza Pasian, fue quien se quedó con el primer puesto.
Por otro lado, Czombos destacó que “el Guácaras estrena, porque se puede ver lo que va a suceder después. Como por ejemplo el caso de Clarisa Navas y la película ‘Las mil y una’ que se encuentra disponible en Netflix, nosotros la pasamos en el Guácaras hace tres años”. O también la directora chaqueña Sonia Bertotti que, con La Playita -filmada en Corrientes- terminó recorriendo todo el mundo.
Por último, para Czombos “el Guácaras es parte de nuestra identidad, parte de nuestra cultura, es nuestra música, es nuestra música, nuestros actores, son nuestros directores que nacieron acá y eso es lo más interesante”, culminó el director.
