Facundo López recibió ayer cadena perpetua por el “homicidio doblemente calificado, por la relación persistente y por femicidio” dictaminado por el Tribunal de la Cámara Criminal de Resistencia. El femicidio de Mariela Fernández ocurrió en 2017 y marcó la precariedad de las denuncias y prevención de violencia de género a las mujeres víctimas.
La Justicia chaqueña dictaminó ayer la condena hecha al femicida de la joven Mariela Fernández. Facundo López recibió cadena perpetua por el homicidio de quien fuera su expareja. La lectura de sentencia se dio al mediodía en Cámara Primera en lo Criminal de Resistencia.
La carátula que condenó fue la de “homicidio doblemente calificado, por la relación persistente y por femicidio, a la pena de prisión perpetua”. La sentencia se dio por unanimidad por el Tribunal integrado por la jueza Susana Gutiérrez, y los vocales Ernesto Azcona y Virginia Ise.
Este resultado es el que pidió la Fiscalía, a cargo del letrado Sergio Cáceres Olivera. El juicio tuvo varias audiencias y transcurrió en meses con presentaciones de testimonios y pruebas.
Además, para el fiscal, durante el juicio fue corroborado el contexto de violencia de género que sufría Mariela, tras comprobarse que habían sido radicadas varias denuncias previas. Se comprobó, también, la forma en la que López asesinó a la joven.
Asimismo, Cáceres Olivera desestimó las pruebas presentadas por el imputado durante el proceso, diciendo que solo eran testimonios de familiares de López y que incluso las declaraciones de personas del mismo barrio comprobaban el contexto de violencia. Recordó que el hombre incluso luego de matar, siguió contestando mensajes desde el celular de la víctima, haciéndose pasar por ella.
Según publicó el portal Diario Chaco, el fiscal aseguró: “Vieron los vecinos cómo López ingresaba y salía varias veces del domicilio. Inclusive luego se fue a almorzar a la casa de un hermano, se bañó, miró tele. Esta fue la actitud que tuvo él. La frialdad con la que actuó. Todo eso quedó corroborado en el debate”.
LA CAUSA
El cuerpo de Mariela Fernández fue hallado el 28 de junio del 2017 pasada la medianoche en el domicilio que compartía con López, en el barrio 29 de Agosto de Resistencia, tenían un hijo menor en común. Su cuerpo estaba debajo de unas prendas de vestir sobre una cama en el interior de la vivienda y cerca de ella hallaron una riñonera, el elemento con el cual su pareja la estranguló.
El caso conmocionó a la comunidad y al colectivo de Ni Una Menos, ya que integrantes de la organización habían acompañado a Fernández a denunciar a López en reiteradas ocasiones por hechos de maltrato. “El barrio sabía que es un hombre violento”, aseguraron desde Ni Una Menos.
