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Cuerpos Ausentes: representación del “genocidio hacia las mujeres”

Un genocidio de mujeres y cuerpos feminizados, así describe la artista chaqueña Giu Rubiolo, tomando a Rita Segato, al femicidio. A cinco años del primer Ni Una Menos, la intervención “Cuerpos Ausentes” permitirá reflexionar de forma colectiva, a pesar del aislamiento.

La obra Cuerpos ausentes es una producción artística que invita a una proyección colectiva de “Vjing”, así lo describe la artista coordinadora Giuliana Rubiolo.

Esta producción audiovisual está originada a partir de los numerosos casos de feminicidios que hubo en Chaco durante los últimos cinco años. Se puede contactar con la artista para obtener la obra audiovisual y proyectarla, la misma se hará de forma simultánea, este miércoles 3 de junio a las 21.

Con esta intervención en el espacio público, a partir de un video que se dispondrá a las personas interesadas en participar, se busca visibilizar la violencia de género sin forzar la situación de encierro obligatorio, argumenta. “A partir de este proyecto, se intenta recurrir a circuitos alternativos por fuera de las instituciones clásicas y modernas del arte, a través de las posibilidades que puede ofrecernos este lenguaje de representación visual para realizar una crítica sobre dicha realidad, como así también apelando al compromiso social por su carácter colectivo”, agrega en las redes sociales del proyecto, dónde, además, se podrán ver los registros de las proyecciones simultáneas.

“Es una obra que se va a proyectar no sólo en algunos espacios públicos de Resistencia (también se hará en otras ciudades y provincias)”, cuenta la artista a elDIARIO de la Región. Explica que lo hará sin contradecir “la situación de encierro obligatorio”. Va a partir de una serie de casos de femicidios en Chaco, aunque aclaró que su perspectiva es trabajar más “el concepto de binarismo. Lo que propongo en esta obra es que hablar del crimen de una mujer o cuerpo feminazado, no se trata sólo de varones y mujeres, sino de disolver dicha asimetría reforzada por el mandato de masculinidad”.

“Trabajo los casos a partir de esta temática”, dice y expresa que pretende que se convierta también en “un espacio para reflexionar sobre esta dominación heterosexual como algo que opera en nuestra cultura como una censura, como una construcción social, como una red que lo cubre todo y está metida en nuestra cotidianeidad”.

“Estamos viviendo un genocidio de mujeres y de cuerpos feminazados y como dice Rita Segato, son como guerras informales y no convencionales, no se trata de un acto de odio, ya tiene un carácter belicista, de genocidio de mujeres y de cuerpas”, concluyó.

 

HISTORIA Y FUNDAMENTO

“El 3 de junio del año 2015, veíamos nacer  Ni Una Menos en las distintas calles del país, como un movimiento feminista, que surgió a partir del impulso por denunciar una gran cantidad de casos que se venían dando en Argentina. A nivel provincial, tuvimos 48 femicidios”.

“Hablar del crimen de una mujer y/o cuerpo feminizado como un acto de odio, significa reducir el problema a lo emocional. La violencia de género no se trata de un problema de hombres y mujeres, sino de disolver la estructura binaria que produce dicha asimetría; como así también el mandato de masculinidad que la refuerza. A partir de esta obra, se trata de brindar un espacio para reflexionar acerca de la dominación heterosexual, como una construcción social que opera en nuestra cultura como una censura. Una red que lo cubre todo: nuestros gestos, actos, trabajo, relaciones, sensaciones y relaciones”.

Este proyecto de investigación en artes, se enmarca dentro de mi realización de la tesina de grado de dentro de la carrera de la Licenciatura en Artes Combinadas, perteneciente a la Facultad de Artes, Diseño y Ciencias de la Cultura, de la Universidad Nacional del Nordeste.

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