La resolución fue dictada por la Sala IV que convalidó que el proceso avance con el alcance de la pretensión punitiva impuesta por el Ministerio Público Fiscal y de la Unidad de Información Financiera (UIF), en calidad de querellantes en la causa.
La Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por los jueces Gustavo M. Hornos (como presidente), Mariano Hernán Borinsky y Ángela Ester Ledesma (como vocales), hizo lugar a los recursos de casación de la parte que querellante.
Recordemos que en la causa se investiga la actividad de una organización criminal encabezada por el abogado Carlos Salvatore, quien traficaba de cocaína a Europa. Este tráfico internacional de estupefacientes fue constatado mediante las investigaciones llevadas adelante en la justicia federal de Roque Sáenz Peña (Chaco), San Nicolás y Lomas de Zamora. Insertando en el mercado lícito sumas millonarias de dinero proveniente del narcotráfico, mediante la utilización de numerosas sociedades, cuentas bancarias y prestanombres.
De esa forma, el máximo tribunal penal convalidó que el proceso avance con el alcance de la pretensión punitiva de los recurrentes. También avaló las prisiones preventivas y los embargos dictados en la causa por un monto total aproximado de $1.600.000.000 para asegurar el recupero de los fondos involucrados en la maniobra investigada y las multas que correspondería aplicar ante una eventual condena de los imputados.
IMPUTADOS
En la causa están imputados Carlos Salvatore, Silvia Susana Valles, Santiago Valles Ferrer, Ricardo Gassan Saba, Carla Yanina Salvatore y Mariano Jesús Castellucci.
La banda delictiva fue condenada por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Resistencia a penas de entre 12 y 21 años de prisión por los delitos de contrabando de estupefacientes y asociación ilícita, por el contrabando de más de una tonelada de cocaína a Portugal en un cargamento de carbón vegetal.
El primero de los hechos descubiertos sucedió el 8 de marzo de 2012 con la exportación de aproximadamente 380 kilos de clorhidrato de cocaína, que finalmente fueron secuestrados en la localidad de Cabanas do Chao, en las cercanías de la ciudad de Lisboa, Portugal. Los paquetes se hallaban ocultos en bolsas de carbón que formaban parte del embarque perteneciente a la firma Carbón Vegetal del Litoral S.R.L. El cargamento provenía de Quitilipi, Chaco, y había sido inspeccionado en la aduana de Barranqueras, en la misma provincia. Su salida del país fue a través del Puerto de Buenos Aires.
El segundo hecho imputado ocurrió cinco días más tarde, durante la requisa de dos contenedores de la misma firma que se encontraban en las terminales 1, 2 y 3 del Puerto de Buenos Aires, a la espera de otro embarque a Portugal. En uno de los contenedores, 70 de las 1050 bolsas supuestamente de carbón contenían cocaína. En total, pesaban poco más de 519 kilos.
Finalmente, en el tercer hecho fueron secuestrados en Lisboa el 11 de abril de 2012 casi 152 kilos de cocaína en un contenedor de la misma empresa. El estupefaciente también estaba camuflado en el interior de bolsas plásticas de carbón vegetal.
