La investigación por la muerte de la niña de 12 años que falleció luego de ingerir una fruta envenenada en la localidad correntina de Mburucuyá continúa. Al parecer, la autopsia dio indicios de que se encontró veneno en el cuerpo de la menor, así lo comunicó el abogado Francisco Pisarello, quien asumió como querellante en la causa. "Hay firmes elementos de que murió intoxicada", expresó el abogado que representa la familia.
"En Corrientes, no se controla la utilización de pesticidas en agricultura", dijo Pisarello y aclaró: "Los niños no ingresaron al predio. Sacaron mandarinas que estaban en el portón de ingreso a la quinta". Esto último responde a una de las líneas de defensa de los hacendados.
"Vecinos indican que el viernes estaban fumigando la quinta", dijo en declaraciones al medio correntino Radio Dos.
"Ninguno de los niños ha ingresado a la quinta en cuestión, esto sucedió cuando los dos iban a la capilla Santa Librada de la primera sección paraje El Pago de Mburucuyá. En el trayecto, cerca de 90 metros, en el portón de ingreso de la quinta encuentran una mandarina y la ingieren. Las frutas tenían un color verduzco, tirando a azul, la que agarra la mandarina es la niña, y le convida al primito que es criado por la mamá de Rocío", comentó.
Contó que la pequeña "se descompuso en el lugar, el niño corrió a pedir auxilio a la madre y fueron dos hermanos, uno de 16 años, que no declaró, y la abuela de la menor".
"El nene tuvo una descompostura importante, con dolor de estómago, que lo llevó a vomitar. Luego fueron en socorro de Rocío y ésta les expresó que tras comer la mandarina sintió mareos, náuseas. A ambos los llevaron en remis al hospital, donde el niño volvió a vomitar", explicó el letrado según publicó el portal elonce.com
EL CASO
VA LENTO
"Hay elementos probatorios que todavía no se agregaron a la causa. Estamos muy consternados y nos vamos a ocupar de este tema", manifestó el abogado querellante.
Insistió en que "no ha habido la celeridad en el caso de parte de autoridades policiales y judiciales”. “El mismo día había que secuestrar los elementos que eran importantes. Un día después se realizaron los allanamientos", mantuvo.
"El hermano de 16 años que fue el primero en verla a la pequeña, nunca fue llamado a declarar… y fue el primero que llegó", manifestó.
"Los niños no ingresaron, las frutas estaban frente al portón de ingreso principal de la quinta, estaban afuera no en el árbol", recalcó. "En la autopsia del cuerpo de la niña hay indicios que indican que había algo venenoso en su interior", enfatizó.
Pisarello alertó que ni los padres de la nena ni el dueño de la quinta concurrieron a declarar, ya que aún no los convocaron.
