Un vecino del barrio de Resistencia Villa Encarnación se acercó a la redacción de elDIARIO para denunciar los frecuentes robos en esa zona.
Diego López es un comerciante de esa barriada que lleva nueve años viviendo allí. Manifestó que los hechos se repiten constantemente en ese barrio y lo demostró con una carpeta con más de diez denuncias sólo a su propiedad. Se trata de robos y también de daños materiales. Contó que lo último fue el robo de la reja de entrada a su casa, así como el intento de forzar a puerta. “También ahora arrojan botellas contra el frente, lo que provoca daños”, agregó.
El vecino expresó que esto se repite con otras familias y, lo que más preocupa, son los reiterados ataques al jardín de infantes y la escuela del barrio. “Afecta a los chicos que van a la escuela, hasta les robaron los ventiladores”, remarcó.
Relató que las personas sospechosas de estos delitos son de la zona, pero el interpreta que “hay un sentimiento de impunidad”, contó que en último ataque a su propiedad hicieron un boquete y la Policía atrapó a las personas dentro de la propiedad, sin embargo, sólo quedaron detenidos dos días. Dijo que la comisaría 10ª tiene un área de cobertura muy amplia y pocos insumos, “se necesita otra comisaría o destacamentos, algo”, dijo.
También remarcó que el consumo de drogas en las juventudes empeora la situación. “Yo entiendo las condiciones de pobreza e ignorancia, pero tampoco nadie se hace cargo”, denunció, “el Estado y la Justicia no hacen nada, falta trabajo, educación”. “Es penoso, vive en un sistema del que son rehenes”, indicó.
Por último, subrayó que estas personas, que también conviven en el barrio, no tienen oportunidades: “Viven en casas de 60 metros y son nueve o diez, cómo van a seguir si nadie se ocupa”.
