Siete personas murieron y otras 88 fueron diagnosticadas con coronavirus en las últimas 24 horas en Argentina, con lo que ascienden a 129 las víctimas fatales y a 2.758 el total de infectados desde el inicio de la pandemia, contexto en el que el Gobierno insistió en la necesidad de mantener un estricto control sobre el estado de los trabajadores y profesionales de la salud.
La cartera de Salud comunicó en su reporte vespertino el fallecimiento de cinco hombres, dos de 62 y 74 años residentes en la provincia de Mendoza; dos de 95 y 80 años residentes en la provincia de Buenos Aires; y otro de 57 años, residente en la Ciudad de Buenos Aires (CABA).
También, reportó el fallecimiento de dos mujeres, una de 64 residente en la provincia de La Rioja, y otra de 95 años, residente en la provincia de Buenos Aires.
En la mañana de ayer, la viceministra de Salud, Carla Vizzotti, reiteró la indicación de mantener un estricto control del estado de los trabajadores y profesionales de la salud que atienden la pandemia y pidió que, ante la presencia de síntomas, el personal no concurra al lugar de trabajo y alerte de la situación al sistema sanitario.
Además, informó que un 14% de los casos confirmados de coronavirus en Argentina corresponde al personal de salud.
Vizzotti observó que la cadena de transmisión en este grupo podría explicarse en el trabajo que el personal realiza en diversos establecimientos de salud, ya que la principal forma de contagio era «horizontal» y no por el contacto con los pacientes. (Fuente: Télam).
