Con cifras oficiales que señalan 12 millones de personas bajo la línea de la pobreza y un incremento de 27,3% en el primer semestre, respecto al segundo semestre de 2017 al punto que el propio presidente, Mauricio Macri, reconoció que “las cosas van a tardar más y que los resultados van a demorar”, el panorama social se avizora por demás crítico.
Desde el oficialismo nacional, insisten en que el único camino es continuar con la política de endeudamiento y preponderancia de lo financiero por sobre el consumo interno y la producción. Con todo, por el momento la resistencia a las políticas de cambiemos la protagonizan los movimientos sociales y organizaciones de base, mientras que la oposición no termina de cuajar en un polo o frente organizado de algún tipo.
A propósito del papel que le toca al partido mayoritario de la oposición, el joven dirigente Rodrigo Ocampo planteó a este matutino que “El peronismo como movimiento nacional tiene que poner la patria por delante, hay que enfrentar al FMI y defender a nuestra gente. Entre el dólar a $40, la inflación en avioneta y la apertura de productos chinos, los laburantes y las pymes están ahorcados. Sumado al golpe a los jubilados, la falta de medicamentos y el congelamiento de la obra pública, no hay expectativas de nada. Es profundizar la crisis y comunicar la chatura, eso hacen desde la Casa Rosada”.
Además, sostuvo: “En 15 meses, Macri se va, mientras tanto debemos transitar una etapa de movilización, afrontar el conflicto junto a la gente. Muchos dirigentes quieren decirnos qué hacer desde un escritorio o WhatsApp, nosotros creemos que el peronismo que conduce es el que sale a la calle. Necesitamos dirigentes con cojones, que estén a la altura de la militancia. Estamos frente a una derecha que persigue, ataca y empobrece. Contra eso está todo permitido, menos quedarse callado y quieto”.
CHACO
En orden al cuadro de situación provincial, Ocampo afirmó: “En Chaco, hay más desocupación con Macri, más pobreza y menos empleos, por cierre de empresas y comercios. Peppo no critica, acata y refuerza el mensaje de la paciencia. Lamentablemente, peleamos migajas, desde el gasoducto hasta el segundo puente Chaco – Corrientes, todo eso no se hará. Peor que la mentira fue la subestimación, sabíamos que este fraude electoral era una cáscara para las provincias del norte argentino”. Por último, afirmó: “Hay una recreación creciente de los acuerdos entre los sectores del campo popular. En la patria y también en Chaco, nosotros trabajamos para la unidad. Pero no a cualquier costo, no queremos definir cargos, sino un programa para sacar al pueblo del sufrimiento y la miseria, ya vivimos Chaco de Ángel Rozas, el pasado más oscuro de Chaco y el armador que hoy tiene Cambiemos en la provincia. No queremos volver al fracaso, vamos a trabajar para organizar la esperanza y para defendernos del neoliberalismo”.
