La campaña rumbo a las legislativas de octubre va dejando sus primeros cruces. Por ahora, con más de ida y vuelta que de contenido de propuestas, pero con protagonistas claros. De una lado, Aída Ayala, secretaria de Asuntos Municipales y candidata a legisladora nacional por Cambiemos, que había declarado que “no era noticia garantizar el pago de salarios”, en relación a la administración de Domingo Peppo, dando a entender cierta impericia en el manejo de la cosa pública.
Enfrente, Beatriz Bogado, legisladora provincial y el ministro de Gobierno, Juan Bergia, que, según el caso, apelaron a enrostrarle “el archivo” a Aída en lo que hace a su inocultable ligazón con los gobiernos de Ángel Rozas y su defensa al reclamo del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires por el Fondo del Conurbano, que de tener el visto bueno de la Corte implicaría un recorte para todos los distritos, que en Chaco en el mejor de los casos sería el equivalente a un mes y medio de la masa salarial.
“Ella debería honrar a la historia y mantenerse callada, como lo hacía cuando el exgobernador Rozas había inventado el famoso 'cronograma de pagos'. Hablo de aquella manera de disfrazar los atrasos escandalosos que sufría la liquidación de salarios en el Estado chaqueño. Eso apenas fue la introducción a lo peor: los entonces gobernantes crearon los bonos Quebrachos, las cuasi monedas con las que cubrían la mitad de los salarios, pero como a su vez en la propia Provincia estos bonos eran tomados a un porcentaje de su valor nominal, terminaron configurando el momento histórico con la más brutal caída en el poder adquisitivo de los sueldos de los trabajadores en Chaco”.
“La gestión de Rozas en la Provincia -agregó- se fue cimentando en el ajuste económico o la coerción, como fue silenciando a los medios de comunicación y como fue sumando funcionarios hasta en el Superior Tribunal de Justicia, a dedo y sin concursos legales”.
Sobre estos datos, la legisladora recordó: “Aída Ayala fue funcionaria de aquel gobierno que asumió en 1995 cuando la Provincia registraba una deuda pública de 595 millones de dólares. Ocho años después, cuando Rozas se iba de vacaciones y Ayala se refugiaba en la Municipalidad, esa deuda se había prácticamente sextuplicado, ya que totalizaba 3.500 millones de dólares”.
CAMISETA DE LOS
CHAQUEÑOS
El ministro de Gobierno dijo: "Los chaqueños necesitamos legisladores que se pongan la camiseta y defiendan los intereses de la provincia", considerando que de cumplirse esa solicitud la provincia perdería miles de millones por año.
En una entrevista radial, Bergia se sumó al rechazo que generaron las declaraciones de la candidata a diputada y funcionaria nacional Aida Ayala sobre su apoyo al reclamo de la provincia de Buenos Aires en cuanto al aumento en sus fondos coparticipables.
El funcionario recordó que, de aprobarse este reclamo que sostiene Buenos Aires ante el gobierno nacional para eliminar el tope del fondo del conurbano “significará una pérdida de entre 3 y 5.000 millones de pesos anuales para Chaco”. En este sentido, agregó: “Es inadmisible que Ayala que aspira a ser diputada por nuestra provincia no defienda los intereses de Chaco y defienda a los porteños”.
Bergia hizo hincapié en que esos fondos de coparticipación: “Van directamente a las arcas provinciales, se vuelca a los empleados públicos, a los sueldos, a obras. Podemos tener discusiones políticas pero no dejar de defender lo que es de Chaco”, reiteró.
“Ayala está defendiendo y va a defender a la Provincia de Buenos Aires”, remarcó el funcionario y la llamó a “la reflexión” sobre esta postura: “Una aspirante a diputada provincial no puede votar en favor de otras provincias en desmedro de Chaco, no puede ceder un centavo a otra provincia por el sólo hecho de haber sido electa por el pueblo chaqueño”, sentenció.
