Al igual que sucedió durante la jornada del miércoles, aproximadamente a las 20.30 de ayer el 911 recibió un llamado sobre un artefacto explosivo colocado en la guardia del hospital “Julio C. Perrando”, por lo que una dotación de bomberos acudieron al nosocomio. Allí, se realizó el protocolo correspondiente, en el cual se verificó que no había ningún explosivo, por lo que se confirmó que fue una “falsa amenaza”.
“Los bomberos se cercioraron de que no haya nada que pudiera poner en peligro al personal del hospital, pero pese a que nos comunicaron que no había peligro, sí se podía observar el temor que había”, expresó una trabajadora del hospital a elDIARIO de la Región.
Si bien aún no se tienen mayores precisiones sobre el caso, las primeras informaciones indican que el autor del último llamado sería un hombre joven y el teléfono utilizado tendría la característica correspondiente a Resistencia.
Por su parte, la directora del hospital, Andrea Mayol, relató en una entrevista televisiva que el primer llamado fue entendido como “una picardía”, sin embargo, este segundo sí despertó un llamado de atención. “Quitando los reclamos, nadie jamás nos había amenazado en forma directa”, además aclaró que los pacientes o la gente que suele acudir al hospital es la que más desconfiada queda con estos episodios.
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