Ante una colmada sala en el microcine del Centro Cultural Guido Miranda, este miércoles a la mañana se llevó a cabo la proyección del documental “Nuestra venganza es ser felices” de Malena Villarino con una charla debate luego de la visualización. Se realizó en el marco del “Mes de la Mujer” y fue organizado por el Poder Legislativo en articulación con el Ministerio de Educación.
Estuvieron presentes la ministra de Educación, Sofía Naidenoff, la presidenta del Poder Legislativo, Carmen Delgado, la jueza federal Zunilda Niremperger, la subsecretaria de Género, Sonia Valenzuela, y la protagonista de la película, la activista y docente Sonia Sánchez.
Además entre el público asistente en la sala estuvieron alumnos y alumnas del Ciclo Orientado de la Escuela Pública de Gestión Social N° 17 “Mariano Ferreyra” y de la EES N° 67 “Manuel Obligado”, docentes y directivos.
La jornada comenzó con el saludo de las autoridades y un breve presentación sobre Sonia Sánchez “Ella es una sobreviviente de la explotación y de la trata, es una luchadora feminista, activista y abolicionista”. Seguidamente, hicieron hincapié en la importancia que significa la visualización de este tipo de materiales en jóvenes del Nivel Secundario. En este punto, la jueza Zunilda Niremperger explicó: “La idea de este cine debate es que cada uno de ustedes pueda ver la película que es fuerte porque nos cuenta hechos de la vida real y seguidamente hacerle preguntas a la protagonista, a quien tenemos aquí. Que les provoque ese impacto que se intenta buscar y que más allá de si es más fuerte o menos fuerte y de los pensamientos y posiciones que se tengan en relación al trabajo y la explotación sexual, se comience a tener conciencia de que ‘el dinero mueve el mundo’ y muchas veces aprovecha de los seres humanos para la comercialización y para la cosificación”.
La letrada prosiguió: “Por eso es un desafío muy grande que estén aquí, porque ustedes son el futuro y son aquellos que pueden conformar este día a día y pueden replicar los pensamientos y las ideas que puedan surgir en este intercambio”.
SOBRE LA PELÍCULA
“Nuestra venganza es ser felices” es un filme de 75 minutos escrito y dirigido por Malena Villarino. Este “ensayo documental” (en palabras de la realizadora) fue estrenado el año pasado y es un recorrido a través del relato de Sonia, que va contando su vida, sus vivencias y expone a lo largo de todo el filme “el sistema patriarcal al que responde la trata y la prostitución”.
Villarino utiliza imágenes poéticas y la voz en off de la misma Sonia que va relatando a su vida desde que partió de su pueblo natal, Villa Ángela, Chaco y su ingreso a la gran ciudad en Capital Federal. Con 16 años, la protagonista comienza a trabajar para una familia como doméstica pero debido al pésimo pago, decide abandonar esa casa. Luego, vive con el resto de dinero que le queda en albergues transitorios hasta que queda en situación de calle, donde conoce a una mujer que le da unos cuantos pesos para bañarse y esperar sentada en un banco de la plaza “que los hombres harán el resto”.
A partir de ese momento, Sonia conoce crudamente el sistema de la trata y decide conseguir un empleo con más futuro. Ve en un aviso que necesitaban una “camarera” en Río Gallegos y cuando llega, solo se trataba de un engaño y pasa 6 años en un prostíbulo en esa ciudad hasta logra escapar.
Si bien la película es cruda y devela la complicidad del Estado, la Policías, la política y la Justicia en mucha de sus vertientes, también muestra el lado humano y la necesidad de “aprender a amar”, comenzando por “una misma”.
MESA DEBATE
Una vez terminada la proyección, que fue bien recibida y con un respetuoso silencio de parte de los jóvenes, los organizadores de la jornada repartieron unos papeles para que las personas que quieran hagan sus consultas a alguna de las personas presentes en la mesa. Naturalmente, la mayoría de las preguntas fueron dirigidas a Sonia. Aquí transcribimos algunas:
-Si sos feminista, ¿no creés que el aborto sería necesario para las personas abusadas y no solo para las que no se cuidan?
-Soy feminista y si soy feminista, soy abolicionista. El abolicionismo lucha contra todas las violencias, no es prohibicionismo. Y lucho por el aborto legal, seguro y gratuito que es un derecho nuestro de las mujeres. Las mujeres parimos, las mujeres decidimos. No solo las abusadas tienen derecho al aborto si no también a aquellas mujeres que no deseamos ser madres. “Ay, ¿pero por qué no te cuidaste?” y ¿por qué los varones no se cuidan? Se los digo a los presentes: ustedes, varones,tienen la misma responsabilidad que las mujeres de cuidarnos. Porque la mayoría de las veces son ellos quienes les dicen a las adolescentes “porque no siento nada”. Esto es mentira, tienen que aprender a usar el profiláctico para cuidarse y cuidar a la persona con la que están.
-¿Cómo hizo para superar todo lo que pasó?
-Hoy tengo 59 años y puedo decirlo porque estoy viva. Hace muchísimos años que pude decir “basta” y empecé a reconstruirme como sujeta de derecho. Primero, a recuperar mi cuerpo, porque yo lo detestaba, lo odiaba, no me miraba. Aprender a acariciarme, a abrazarme. Cuando aprendía a acariciar, acariciándome…Les surgieron a todos y a todas que están aquí presentes, hagan ese ejercicio en la ducha, en el espejo, es maravilloso. Ahí, yo aprendí que me estaba queriendo y a partir de ese momento, no permito a nadie que me grite ni que se atreva a querer pegarme. Después tuve que aprender a tener voz propia, porque cuando te hacen la puta de todos, no tenés voz propia, el varón habla por vos, el Estado habla por vos, las agencias internacionales hablan por vos.
-Al día de hoy, ¿sentís ganas de vengarte de las personas que te prostituyeron?
-(Se ríe) No, mi venganza es ser feliz. No con daño físico ni nada, si no siendo feliz. Siendo feliz como ahora, que estoy en mi provincia. Siendo feliz delante de ustedes porque yo soy la mujer más feliz cuando entro a las escuelas secundarias, porque yo también un día estuve sentada ahí y no quiero que padezcan lo que yo sí. Porque hoy, en Argentina, no vienen por mí, yo ya soy vieja: vienen por ustedes, porque hoy los torturadores prostituyentes piden niñas, piden adolescentes.
MUESTRAS DE CARIÑO
Una de las últimos temas que se tocó fue las cuentas de Only Fans o Cafecito, donde Sonia se mostró muy preocupada y las comparó con la prostitución, afirmando que el consumo de pornografía en la sociedad perpetúa el sistema de trata de personas y cada vez está siendo más masivo y menos controlado.
Al finalizar la mesa, y en el hall de acceso del Guido Miranda, adolescentes le dieron muestras de cariño a Sonia, algunas la abrazaron, se tomaron fotos con la activista. Hubo muchas preguntas que no fueron respondidas, pero como dijo Niremperger al finalizar la charla: “Mucho de lo que vieron y escucharon hoy, seguirá resonando en sus cabezas, y esa es la idea”.
