En un conmovedor acto bajo la lluvia en la vereda de Casa de Gobierno, familiares, amigos y allegados de Maximiliano Monges entregaron un petitorio al Ejecutivo exigiendo que se cumpla la ley Nº 6285 y su protocolo de búsqueda. Además, reiteraron el pedido para que se informe sobre las acciones concretas llevadas a cabo desde la desaparición del joven chaqueño el 20 de julio, cuando sus prendas de vestir fueron halladas en el puente Belgrano.
La movida de ayer estuvo encabezada por la madre de Maxi, Graciela Monges, quien sostuvo que se siente “violentada por las instituciones” debido a la falta de precisiones respecto de la búsqueda de su hijo, a 96 días de su desaparición. La mujer sostiene que hasta el momento no se cumple con la ley Nº 6285, que en su artículo 9º establece que “el Poder Ejecutivo tiene que arbitrar los medios presupuestarios para publicar la fotografía de la persona desparecida en los medios de comunicación gráficos, radiales y televisivos, y que éstos tienen que ser gratuitos, incluso tienen que pasar la fotografía en un horario central”.
Inclusive, explicó Graciela, dicha norma sostiene que “todos los jefes de comisarías, una vez recibidos la foto y el identikit, también tienen que arbitrar los medios de difusión, independientemente de las medidas que se tomen en el juzgado de Menores o de la fiscalía”. No obstante, aseguró que tras recorrer varias dependencias públicas y seccionales no encontró la foto de su hijo: “Por eso pido que se cumpla el protocolo de la ley Nº 6285”.
LA BÚSQUEDA SIN PISTAS
Según detalló Graciela, éste el segundo petitorio entregado al Estado, ya que el 12 lo hizo pidiendo que se detalle las acciones de búsqueda respecto de la desaparición de Maxi, pero los detalles no llegaron. “Acciones concretas de búsqueda en los escritos no me han demostrado”, señaló.
En el petitorio entregado, la madre del joven le sumó el pedido de que “la búsqueda se haga por agua y por tierra, como corresponde, y que se cumpla el protocolo legal”.
“Todas las fuerzas se han notificado de la desaparición pero nadie me ha detallado acciones concretas de búsqueda: dónde, cuándo, en qué perímetro, en qué paralelo”, insistió Graciela que espera tener certezas sobre la investigación que llevan a cabo las instituciones públicas.
Y, en esa línea, sentenció: “Como madre siento una total desidia por parte de las instituciones, porque aparte del dolor y la angustia que me provoca la desaparición de mi hijo, siento que las instituciones me han violentado como madre y como mujer”.
