María Magdalena Moreira, de 16 años y perteneciente a la etnia wichí, fue vista por última vez el lunes en la casa donde vivía junto a su madre en el lote 94 de Miraflores. La denuncia de su extravío fue radicada recién una semana después, el lunes por la tarde, y este martes la Policía halló su cuerpo en el patio del domicilio de Facundo Narciso de 20 años, que conocía a la adolescente y era el principal sospechoso por su desaparición.
Tras ser detenido, según informaron fuentes policiales, el acusado confesó el femicidio de la adolescente y quedó a disposición del magistrado en turno de Castelli.
De acuerdo con el parte policial, la denuncia por la desaparición de la adolescente se realizó recién el lunes por la tarde, desde cuando activaron el Protocolo de Actuación Policial en materia de Personas Desaparecidas, ley Nº 1703/18. Con la participación de unidades policiales de las comisarías aledañas y de Unidades Especiales, realizaron rastrillajes en zonas rurales y barrios.
Alrededor de las 15 de este martes, junto a un testigo y autoridades judiciales, los agentes allanaron la vivienda del sospechoso, ubicada en el barrio Norte de Miraflores, y encontraron el cuerpo de una joven enterrado en el patio. Más tarde, identificaron los restos que pertenecían a Moreira.
En paralelo, durante los operativos de rastrillaje y con la información recabada, aprehendieron a Narciso, que estaba escondido en el paraje Laguna el Muerto, ubicado a 50 kilómetros de Miraflores. Al momento de la detención, el joven reconoció la autoría del femicidio.
Conforme a lo ordenado por el magistrado interviniente, el detenido fue traslado a la comisaría de Castelli.
Por el hecho, se iniciaron actuaciones judiciales de rigor a cargo de la Fiscalía en turno.
