Según el Informe de Femicidios y Trans-Travesticidios del Observatorio de Mumalá «Mujeres, Disidencias, Derechos», se registraron 53 femicidios en nuestro país desde el 1ro de enero hasta el 28 de febrero de este año, un femicidio cada 27 horas. Además, se reportaron 92 intentos de estos asesinatos por odio de género, lo que evidencia la situación de emergencia y urgencia que enfrentan las mujeres y disidencias en Argentina.
Según el informe, al registrar el vínculo entre víctima y victimario arrojó que el 53% de los femicidios fue cometido por parejas o ex parejas. El 17% de los femicidios fue cometido por hombres conocidos por la víctima. El 12% de los femicidios fue cometido por familiares directos de la víctima. El 7% de los femicidios fue cometido por familiares no directos de la víctima. El 5% de los femicidios fue cometido por hombres desconocidos por la víctima. Mientras que del 6% restante no hay datos.
Otro dato preocupante que arrojó el informe es que la edad promedio de las víctimas es de tan solo 39 años.
De esas víctimas, el 15 % había denunciado a su agresor. De ese universo que contaba con denuncia, el 50 % tenía orden de restricción de contacto o perimetral y el 15 % además botón antipánico y ninguna contaba con dispositivo dual, pulsera.
Asimismo, el 52 % de las víctimas tenían hijos e hijas. 51 niños, niñas y adolescentes se quedaron sin madres y el 43 % convivía con su agresor
Además, entre el 1 de enero y el 28 de febrero de 2024, registraron 92 intentos de femicidios, femicidios vinculados y trans/travesticidios, es decir, 1,7 intentos de femicidios por cada femicidio concretado. En cuanto a la intervención de terceras personas para auxiliar a la víctima en el hecho violento, se destaca que en el 28 % de los casos intervinieron las fuerzas de seguridad.
Paula Ojeda, coordinadora de MuMaLa Chaco explicó que: «En un año en el que se proclaman emergencias de todo tipo, las mujeres y lgbtiq+ no reciben la atención ni la sensibilidad del Estado, por el contrario, vemos cómo este gobierno desmantela ministerios, desjerarquiza políticas públicas, congela o cierra programas como el Acompañar y precariza la atención de la línea 144 de asesoramiento para mujeres y disidencias en situación de violencia».
«Mientras la violencia por motivos de género cobra vidas a diario, Milei parece empeñado en socavar los derechos y conquistas construidos para abordar la problemática». sentenció Ojeda.
Victoria Aguirre, vocera nacional de Mumalá afirmó: «hemos alertado que las crisis sociales y económicas influyen en la expresión de las violencias. Estamos en peligro, al igual que las personas adultas mayores y las infancias. Repudiamos las medidas que empobrecen el abordaje de las violencias machistas, su resultado será la multiplicación de las mismas.»
