La directora del efector Andrea Mayol expresó el malestar generalizado principalmente en los pacientes y familiares que tuvieron que ser trasladados en ese momento.
“La sensación de pesar la padecieron las personas que estaban esperando la consulta y los familiares, si bien sólo hubo una urgencia por un incidente vial la situación podía tornarse más grave si la Guardia tenía una mayor demanda espontánea, porque se desfuncionalizó por un momento para que los equipos pudieran revisar la zona de acuerdo al protocolo de explosivos, fue un momento preocupante dejar sin posibilidad de respuesta a cualquier emergencia provincial”, advirtió.
La denuncia se manifestó a través de dos llamados al 911 con una amenaza de bomba en la Guardia de Emergencia del Perrando. Inmediatamente se notificó al Ministerio de Seguridad y el equipo de explosivos de la Policía y los bomberos ejecutaron el protocolo correspondiente. Finalizaron la revisión de las áreas de la Guardia, Diagnóstico por Imagen y la pastilla 4, alrededor de las 17 sin ningún hallazgo de explosivos.