Los trabajadores y trabajadoras del Instituto de Cultura de Chaco organizaron ayer una nueva medida de fuerza, en el marco del programa de reivindicación que vienen encarando para el cese de la precarización laboral y la falta de recursos que padecen. “Nuestro organismo se encuentra con más de la mitad de sus trabajadores en situación de precariedad, compañeros que realizan tareas de mantenimiento de museos y espacios Culturales, técnica, producción, promoción, administración, planificación y ejecución de las políticas culturales de la provincia. Tareas con años de antigüedad en el sector, cobrando ingresos que van desde 3.000 a 11.000 pesos”, señalaron.
En ese sentido, remarcaron que “se han arbitrado los caminos administrativos para que el pase a planta en el Instituto de Cultura se lleve adelante, vemos de parte del Ejecutivo una dilación y falta de voluntad política para tal proceso”. Y agregaron: “Hace más de ocho años, los trabajadores reclamamos la aprobación del proyecto de ley del trabajador de Cultura. Una legislación que contemple las particularidades del trabajo cultural y el escalafón artístico que regularía las condiciones laborales y salariales”.
Por otra parte, informaron que las irregularidades conllevan “a abusos y arbitrariedades” de parte de las autoridades hacia los trabajadores implementando descuentos a trabajadores en forma injustificada, evaluaciones mensuales mediante tablas porcentuales “sin criterio y de manera discriminatoria, ya que sólo se aplica al personal precarizado”. Todo esto se agrava en el marco de un contexto político-económico nacional, donde los derechos de la clase trabajadora se ven vulnerados con despidos masivos en el Estado, salarios pulverizados por la inflación, tarifazos, paritarias a la baja, precarización laboral y el intento del Gobierno nacional de impulsar la reforma laboral que expresa la flexibilización laboral, con quitas de derechos históricos adquiridos por el movimiento obrero argentino se agravan con la violencia institucional como respuesta al conflicto social.
CONTRA EL AJUSTE
Por ello, subrayaron: “Los trabajadores estatales de la provincia de Chaco no estamos ajenos al avance brutal de políticas ajustadoras, de despidos, miseria y hambre. Claro está que con el pacto fiscal firmado por el Ejecutivo provincial, nuestras condiciones laborales están sujetas a lo mencionado y ello se ve en las deudas de regularización laboral, la pérdida de la masa salarial y el reciente proyecto de ley de retiro voluntario, donde con anterioridad del mismo el gobernador a mencionado un retiro voluntario de 7.000 trabajadores estatales de la provincia”.
Por último, reafirmaron su solidaridad: “Con nuestros compañeros de organismos nacionales como el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y Agricultura Familiar quienes han sufrido despidos, y hoy defienden su fuente de trabajo”.
