Algo muy instalado en nuestra sociedad, es que sin carne no se puede vivir, ¿es tan así?; ¿existe alguna dieta (omnívora o vegetariana) mejor que la otra?
-Realmente está muy instalado el consumo de carne, sobre todo en la sociedad o costumbre de los argentinos, pero la verdad es que una dieta que no abuse de ésta es posible. Cabe aclarar un punto, no hay una alimentación mejor que otra, al menos desde un punto de vista nutricional, siempre y cuando este planificada porque realizando un plan adecuado ambas dietas pueden proporcionar todos los nutrientes requeridos para una alimentación óptima.
Es cierto que el vegetarianismo está asociado a un estado de salud mejor, porque ayuda a prevenir ciertas enfermedades, como por ejemplo el colesterol alto o aquellas afecciones que están relacionadas al consumo masivo de carne; dado que las dietas vegetarianas son abundantes en fibra, vitaminas, minerales naturales y antioxidantes que quizás el común de la gente al no tener una alimentación planificada puede carecer de estos beneficios alimenticios.
Hago hincapié en la alimentación planificada porque es muy común el famoso vegetariano autodidacta que de un día para el otro deja la carne sin recurrir a un profesional y comienza a consumir todos los días fideos, por ejemplo. De esta manera,esta persona tiene una alta probabilidad de tener un déficit de nutrientes, pero en el caso de ajustar la dieta para reemplazar la carne, se podrá logar una alimentación segura. Caso similar pasa con un omnívoro, ya que si tiene un aporte de todos los alimentos y su alimentación es saludable, también puede tener los mismos beneficios. A lo que voy es que si una persona abusa de los ultra procesados, consume diariamente comida chatarra y abusa de las gaseosas, es claro que ante este ejemplo la alimentación vegetariana es mejor; pero la realidad es que con planificación no hay una que sea mejor que otra y ambas pueden capaces de cubrir todos los requerimientos nutricionales en todas las etapas de la vida. Porque hay una creencia de que un niño no puede ser vegetariano y la verdad es que si puede, pero siempre y cuando la alimentación sea planificada.
Hay que entender que pasar al vegetarianismo o veganismo requiere de un proceso de transición, pero la realidad es que el único nutriente que debe suplementarse en un vegetariano es la vitamina V12, la cual se logra de manera muy fácil y económica. Pero hay quienes se asustan y ven como algo negativo la suplementación al cambiar a una dieta vegetariana, lo cual resulta curioso porque les impacta o asusta que alguien se suplemente, pero no toman conciencia del consumo masivo de carne que tenemos, por lo que hay un doble discurso.
En teoría, una dieta balanceada está compuesta por todo tipo de alimentos, incluido la carne, ¿pero que otros alimentos que pueden aportar los nutrientes de las carnes?
-Ni la carne, ni ningún alimento es indispensable, porque cuando hablamos de nutrición, lo que nos interesa son los nutrientes y hoy en día se puede decir que, si la carne aporta x nutriente, pero hay otro alimento que aporta exactamente lo mismo. Lo que sucede muchas veces con el consumo de carne es que, al estar tan arraigada a nuestra cultura, pasa a ser una cuestión de practicidad. Es muy probable que a una familia tipo le digas que no consuma carne esta semana y no tenga idea de que cocinar, por eso es necesario el tema de educar para saber cómo reemplazarla.
Otra cuestión muy instalada, cuando se escucha que alguien se hace vegetariano es “y las proteínas de donde las saca?” porque la mayoría relaciona la carne con ésta, pero hay proteínas en muchísimos alimentos, por ejemplo, en las legumbres: lentejas, arvejas, garbanzos, en la soja, los lácteos. Realmente es raro tener un déficit proteico sino se consume carne. La cuestión es que debemos acostumbrarnos al quitarla, a tener una mayor ingesta de legumbres.
Teniendo en cuenta que lo económico es un factor a considerar, en especial en nuestro país, ¿qué tan sencillo o accesible es cambiar a una dieta vegetariana?
-Esta es otra cuestión que podemos desmitificar, porque otro mito es que la alimentación vegetariana es cara o más costosa que la omnívora. Pero la verdad es que una dieta vegetariana es una dieta natural, donde las legumbres pasan a ser el principal alimento y si se compara el precio de un paquete de legumbres a un kilo de carne y además añadimos cuanto rinde cada uno de éstos, termina siendo mucho más rentable las legumbres.
La creencia pasa o se instaló, porque cuando uno modifica su dieta, la mayoría cree que hay que comprar cosas de una dietética, gastando dinero en alimentos que son ‘reemplazo de tal o cual cosa’, pero los nutrientes realmente están en los alimentos naturales, las frutas y verduras y por eso no es cara la alimentación vegetariana.
Por último, la entrevistada remarcó la importancia de acudir a un profesional y no dejarse llevar por modas o aquellos que pueden “influenciar” en las redes sociales, ya que muchas veces no son personas formadas y pueden lanzar información sin sustento y que puede ser peligrosa para aquellos que los consumen
-Es cuestión de informarse y acudir a un profesional de la nutrición siempre, para conocer más sobre la alimentación y evitar las deficiencias alimenticias. Esto es sumamente importante, pensar realmente que cambiar la alimentación puede ser muy beneficioso, pero hay que hacerlo con personas calificadas y certificadas en nutrición.
IMPACTO AMBIENTAL
Además, Paula dejo una pequeña reflexión sobre las ventajas a nivel sustentable y ambiental de una una dieta vegetariana, «si tenemos en cuenta todo lo que se necesita para la producción de la industria de la carne, aquí si podemos asegurar que el vegetarianismo es mucho mejor. Pero incluso reducir el consumo de carne, sin dejarla del todo, ayuda muchísimo al ambiente».
«Yo soy partidaria de que cada uno desde su lugar puede lograr cambios aportando su granito de arena. Porque al informarnos nos enteramos de que para garantizar o generar un kilo de carne se necesita una cantidad increíble de agua potable y kilos de granos; si a esto le sumamos que solo los argentinos consumimos en promedio cerca de 50 kilos de carne por año, es realmente chocante y escalofriante cuando uno toma conciencia. Ni hablar de la explotación animal y todo lo que esto implica».
