“Ante versiones periodísticas que atribuyen el relevo (de estos funcionarios) por cuestionamientos con la participación institucional en el operativo desarrollado días atrás en dicha localidad”, informó, el jefe de esta fuerza, el Comisario General Néstor Roncaglia, explicó que la medida “se motiva tras verificarse la falta de coordinación y de comunicación oportuna de los sucesos ocurridos, circunstancia ésta que hubiera posibilitado desarrollar tanto mecanismos preventivos superadores como de asistencia y apoyo al personal subalterno que participó de los operativos”.
La aclaración de la fuerza consiste en que la separación de estos jefes no se debió a un cuestionamiento del actuar policial sino a una negligencia en sus funciones. “Se enfatiza así que en modo alguno el alejamiento de dichos efectivos obedece a cuestionamientos respecto del obrar de los mismos, y que la medida se corresponde con un reproche a la actitud de mando y coordinación esperada de los mismos”, comunicó la PFA.
“Los jefes de las distintas unidades de la PFA son instruidos permanentemente sobre la obligación que tienen de conducir con el ejemplo y el acompañamiento que deben a sus subalternos y que además, disponen de todo el apoyo de sus líneas de conducción y a ellas deben informar en tiempo y forma para disponer de los medios necesarios para el cumplimiento de las misiones asignadas. La conducción estratégica gira alrededor de la comunicación oportuna de sucesos. Se ratifica una vez más, no se cuestiona la intervención del personal de PFA en apoyo de los camaradas de la Policía de la Provincia del Chaco, circunstancia que obedeció a un deber legal y para ello no se necesita ninguna orden, simplemente se debe actuar”, finalizó el comunicado.
A pesar del énfasis en la explicación, el informe deja entrever al menos un error grave de las fuerzas policiales en la contención de este tipo de hechos.
En Sáenz Peña fue desplazado Julio Gustavo Romero y se designó en su reemplazo a Fernando Nelson Orihuela. El extitular regional NEA en Corrientes, Walter Enrique Bernal, fue sustiuido por el comisario Ricardo Oscar Arancedo.
MARCHA EN
SÁENZ PEÑA
En contacto con elDIARIO de la Región, el abogado de la familia Mario Piccoli, informó que este viernes por la mañana fue hasta la fiscalía dónde continúa la investigación y estuvo acompañado por una marcha de la comunidad y familiares para pedir Justicia. Descartó las versiones sobre otros menores lastimados (incluso se habló de un bebé), pero sí confirmó que está la denuncia hecha en Desarrollo Social por la retención de tarjetas alimentarias que hacía el dueño del mercado Impulso, Orlando Proselek, a gran parte de la comunidad originaria de esa barriada. De confirmarse, sería “parte de la responsabilidad” por lo que pasó, dijo el abogado.
BARSESA CON
FAMILIARES
El ministro de Seguridad Pública Carlos Barsesa, se reunió en la Unidad Regional Centro de Sáenz Peña con familiares de Ismael Ramirez y referentes de pueblos originarios. Barsesa relató: “Las organizaciones de Pueblos Originarios se mostraron preocupadas por el hecho y por el maltrato mediático que sufrió y cómo esto afectó al pueblo y a los familiares”.
Respecto a la investigación comentó que estuvieron en la Fiscalía de Investigación N° 3 de Sáenz Peña. Solicitó que aquellas personas que tengan fotos y videos los acerquen al Fiscal para poder ayudar a esclarecer los hechos.
Por último, Barsesa dijo que estuvo con su equipo visitando al otro niño: “El chico está bien, ya fue operado y hay muchas posibilidades de que salve el ojo comprometido”, contó.
