Ayer a las 19, se desarrolló en el edificio donde funciona la Escuela Mariano Ferreyra, en Villa Marín, un abrazo simbólico para pedir a las autoridades de la cartera educativa que den respuestas acerca de la continuidad del proyecto especial.
Ante un imponente público compuesto por alumnos, exestudiantes, familiares, docentes y directivos, se llevó a cabo una charla encabezada por el director, Daniel García, en la que dio detalles sobre la respuesta “parcial” de la Dirección General de Planeamiento y Evaluación Educativa: “El Ministerio informó públicamente que reconocía la enorme labor que desarrolla esta escuela. Pero cómo se responde eso concretamente. Cuando planteamos el proyecto, éramos un anexo de la Escuela Nº 60, donde los adultos estudiaban y eran atendidos por la vía del Bachillerato Libre para Adultos (BLA). Mientras que los menores con ‘sobreedad’, quedaban sin contención. ¿Cómo hacemos para que los pibes que tienen 15, 16 o 17 años que no quieren ir a 1º año con uno de 12? No es la misma realidad, ¿cómo hacemos para contener a los pibes? Necesitamos un nuevo modelo de escuela para atender la emergencia”.
“Queremos que la Dirección de Planeamiento nos dé un encuadre legal para que se pueda resolver el problema de los pibes que tienen edad avanzada: eso nunca sucedió. Entonces nos dicen: ‘no, tienen que adecuarse a la planta orgánica funcional de un BLA’. Pero nosotros no lo somos. Si tuviéramos que adecuarnos, tenemos que echar a todos los menores de 18 años: hay más de 150”, argumentó el directivo.
Cabe recordar que días atrás se llevó a cabo una asamblea en la cual la entidad educativa anunciaba el fin del proyecto por la renovación de un solo mes. El Ministerio de Educación les solicitó entonces los documentos pertinentes para evaluar el estado de la escuela.
