El 17 de abril, se celebra el Día Internacional de la Lucha Campesina por la Tierra, una fecha que toca de cerca a la provincia, ya que sus cimientos organizados inician también por estos lados. Tal es el caso de la Unión Campesina Poriajhú, asociación que desde el centro chaqueño es continuadora de las grandes luchas cooperativistas de la década del 20, así como de las ligas agrarias setentistas.
elDIARIO de la Región habló con uno de los referentes de Poriajhú y reconocido sindicalista, Toto Galván. Remarcó el amplio proceso histórico de lucha en el campesino que tiene a Chaco como pionero del cooperativismo que enfrentó a los grandes monopolios explotadores de recursos naturales, tal como sucede en la actualidad.
En 1989, la unión campesina resurge “como continuidad” a lo que la dictadura militar había aplacado “a sangre y fuego” en los años 70. Ante la desarticulación de la lucha y el movimiento, Latinoamérica tomó la posta de retomar estas reivindicaciones que estaban y están intactas.
Junto a Los Sin Tierra de Brasil y las uniones de Paraguay, Poriajhú se organizó luego del intento de desalojo del Municipio de Sáenz Peña de 800 hectáreas que eran ocupadas por más de 250 familias y se constituyó como la primera asociación luego de la oscura etapa del golpe de Estado.
“Tenemos una visión donde se necesita una articulación también con los trabajadores de la ciudad y las asociaciones de América Latina”, recalcó Galván.
De esa manera, luego de dos sucesos históricos, surge el I Encuentro Continental de la Resistencia Indígena, Negra y Popular, y la conformación de la Coordinadora Latinoamérica de Organizaciones del Campo (que luego seguirá con la integración mundial en la Vía Campesina).
Bajo la consigna global de cómo será la producción de la tierra para los pobres, la lucha volvió a tener una estructura que, aunque no tenga los reflectores puestos, se construye día a día y muy cerca en el campesinado chaqueño.
“El movimiento ha tenido un retroceso de restauración conservadora”, analiza Galván y agrega que la pandemia ha vuelto a exponer las grietas del sistema capitalista, y mientras millones de personas sufren, las potencias imperialistas continúan su carrera armamentista, regionalmente, contra Cuba y Venezuela. “Después de esto, vamos a tener que repensarlo todo”, señala.
EFECTO PANDEMIA
El referente campesino también habló de cómo afecta la cuarentena a la producción. Fijó que la principal dificultad es en la distribución. “Nos ponen muchas trabas para salir con nuestros productos, sobre todo los Municipios”, agregó.
Explica que las producciones, más aún de ganadería, se enciman en los campos y les genera gastos extra. También, agregó: “Se nos dificulta acceder a los alimentos (para el ganado) y los insumos”.
“Yo, que estaba abasteciendo a Sáenz Peña, recién esta semana pude conseguir el permiso restringido para circular”, cuenta. “Veníamos mal antes de la pandemia. La agricultura familiar viene vapuleada desde hace mucho tiempo”, cerró.
