El entrenador de River, Marcelo Gallardo, les solicitó a los seis futbolistas extranjeros del club que se encuentran en sus respectivos países que regresen durante esta semana a la Argentina para estar listos y disponibles en el caso que se confirmen que en agosto regresarán los entrenamientos, suspendidos desde marzo a raíz de la pandemia de coronavirus.
En ese sentido, el Muñeco Gallardo les comunicó a Rafael Santos Borré, Juan Fernando Quintero y Jorge Carrascal que deberán regresar desde Colombia, a Paulo Díaz de Chile, Robert Rojas de Paraguay y Nicolás de la Cruz desde Uruguay, que completen los trámites pertinentes para conseguir plazas en los vuelos de repatriación, informó a Télam una fuente del entorno del entrenador.
«La idea es que antes del viernes estén todos en Buenos Aires para someterse a test, seguir los pasos establecidos por los protocolos sanitarios relacionados con el período de cuarentena y tenerlos disponibles para la primera semana de trabajo que se presume será en agosto», confió una fuente de la institución de Núñez.
Los colombianos Borré y Juanfer Quintero iniciaron sus trámites para tomarse un avión que partirá desde Bogotá anoche mismo y es posible que se sume Carrascal, quien fue el último jugador en irse a Colombia, más precisamente a su tierra natal en Cartagena, hace dos semanas, luego de haber pasado prácticamente el mayor período de aislamiento social en la Argentina.
Para el resto de los jugadores el trámite es más sencillo, dado que, por ejemplo, Nicolás de la Cruz desde Montevideo tiene varias opciones para regresar a Buenos Aires, y se estima que será el primero en regresar a la Argentina en los próximos días.
El paraguayo Rojas, por su parte, quien se encuentra en Asunción, y el chileno Paulo Díaz en Santiago, comenzaron a tramitar sus permisos para volar en estas horas y tampoco deberían tener inconvenientes en resolver la situación para regresar a la Argentina e iniciar antes del fin de semana el aislamiento preventivo y someterse a los test y demás estudios médicos.
Ni bien lleguen a Buenos Aires, los jugadores se harán estudios para detectar si tienen o tuvieron coronavirus, estarán una semana aislados por prevención y si los resultados son negativos podrán continuar otros siete días de cuarentena pero ya con posibilidades de entrenamiento en sus domicilios.
River tiene pensado retomar las prácticas en el predio deportivo que posee en Ezeiza con los protocolos sanitarios indicados y se está buscando un hotel de la zona para diagramar una suerte de «burbuja sanitaria», tal como sucedió en la MLS estadounidense y en la NBA, que se pudo retomar la actividad en la ciudad de Orlando.
EL ÚLTIMO JUEGO
El último partido de River fue el 11 de marzo pasado, cuando goleó a Bi Nacional de Perú por 8-0 en un partido válido por la segunda fecha del Grupo D que completan San Pablo, de Brasil, y Liga Deportiva Universitaria de Quito, de Ecuador, es decir que cuando se inicien los entrenamientos habrán pasado casi cinco meses de inactividad.
A nivel local, el equipo dirigido por Gallardo jugó por última vez el 7 de marzo, por la última fecha de la Superliga, cuando empató en Tucumán con el local Atlético (1-1) y ese resultado permitió la consagración de Boca como campeón.
Si bien no existen precisiones sobre el regreso del fútbol doméstico, la Conmebol anunció que desde el 15 de septiembre se retomará la Copa Libertadores, siendo que restan cuatro partidos para completar la fase de grupos y además de River, la juegan Boca, Racing, Tigre y Defensa y Justicia.
