Con un estadio colmado de mujeres de todo el país, Chaco comenzó a vivir el XXXII Encuentro de Mujeres.
A las 8 de la mañana, se abrieron las puertas del Club Sarmiento para recibir a las miles de mujeres de todo el país que llegaron en las últimas horas a la provincia. Con cánticos y banderas, el campo del estadio dio marco al histórico evento.
Pasadas las 10, integrantes de la Comisión Organizadora coparon el escenario principal para dar lectura a un documento que repasó los ejes centrales que serán materia de debate y reflexión en los 71 talleres que conforman esta edición.
Referentes de las comunidades Qom, Wichí y Mocoví dieron una cálida bienvenida a las presentes en sus lenguas nativas. Al grito de “Unidas en un sólo abrazo”, las oradoras destacaron el crecimiento del encuentro autoconvocado que busca a través de una mirada de construcción colectiva resistir ante un sistema explotador, patriarcal y opresor.
En uno de los primeros puntos, se destacó la elección del Chaco como provincia organizadora, un acierto que quiebra con el sistema de explotación basado en la centralización del poder.
“Estamos resistiendo en la región más postergada del país. Aquí luchan las trabajadoras, las campesinas, las mujeres de los pueblos originarios cuyos ancestros han sobrevivido a las campañas genocidas, las estudiantes, las desocupadas, las amas de casa, las sindicalistas, las feministas, las víctimas de femicidio, sus familiares y todas las víctimas de la justicia machista, las mujeres trans, lesbianas, bisexuales, la diversidad sexual. Las mujeres en situación de encierro, las mujeres migrantes, las afrodescendientes, las hacedoras culturales, las de agrupaciones por el derecho a la tierra y la vivienda”, resaltaron en la apertura.
SIETE PILARES
Los encuentros nacionales de mujeres plantean una forma distinta de hacer política; bajo los pilares de la autogestión, autoconvocatoria, democracia, pluralidad, autofinanciamiento, federalismo y horizontalidad, miles de mujeres organizadas en comisiones apuestan al consenso, la diversidad y la igualdad. En estos puntos, y con una fuerte interpelación a las políticas nacionales de ajuste, las chaqueñas resaltaron que el presupuesto provincial depende en un 86 por ciento de los Fondos de Coparticipación Federal. “La distribución de ellos, que ya era injusta por la concentración del 75 por ciento para la Nación y 25 por ciento para las provincias, ahora quedaría reducida, para dársela a Buenos Aires sin que la Nación resigne un centavo”.
LEY EMERGENCIA DE VIOLENCIA DE GÉNERO Y PRESUPUESTO, YA
Uno de los pedidos masivos en la apertura fue la declaración de la Ley de Emergencia de Violencia de Género. Con la mirada puesta en una “justicia patriarcal que avala la impunidad de violentos y femicidas” se resaltó que el Estado no destina recursos ni propone respuestas integrales para abordar la problemática. “La falta de voluntad política de los distintos gobiernos impidieron la implementación de la Ley de Erradicación de la Violencia contra las Mujeres. Por lo que exigimos desde aquí la declaración de la ley de emergencia en violencia de género a nivel nacional y provincial que implique presupuestos con perspectiva de género; además de la declaración de emergencia por transfemicidios”, sostuvieron las referentes de las organizaciones feministas.
En consonancia con el reclamo de una ley nacional, se resaltó la situación actual del Consejo Nacional de Mujeres que sufrió recortes de al menos 67 millones de pesos, presupuesto que disuelto por decreto y transformado en un Instituto bajo la esfera del Ministerio de
Desarrollo Social, lo que esto implica pérdida de autonomía y federalismo.
“En 2016, el Plan Nacional de Acción de Prevención, Asistencia y Erradicación de la violencia contra las mujeres destinaba un presupuesto de menos de cinco pesos por mujer, el proyecto de Ley presupuestaria para el 2018 omite toda mención explícita de la asignación para el próximo año. La falta de transparencia delata la intención de incumplir compromisos asumidos, en un presupuesto sin ningún programa que se plantee cerrar las brechas de género”, explicaron.
ABORTO SEGURO Y GRATUITO, LA DEUDA DEL ESTADO
La lucha por la legalización del aborto seguro y gratuito crece encuentro a encuentro. La campaña iniciada por las organizaciones participantes se lleva adelante bajo la premisa de Educación Sexual para Decidir, Anticonceptivos para no Abortar, aborto legal, seguro y
Gratuito para no morir.
“Ningún derecho nos fue otorgado sin una lucha previa, ninguna lucha es posible sin debate. Exigimos la aprobación del proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo
presentado por sexta vez en el Congreso Nacional, reafirmando el carácter laico que debe tener el Estado”, detallaron.
En esta línea, se explicó las falencias del Estado en la materia. “El Programa de Educación Sexual Integral, clave para la educación y prevención de violencias, sufrió una reducción de un tercio del personal. Al igual que el Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable y la Ley de Salud Mental, que son progresivamente desarticulados”. Por último, se hizo mención a que hasta el momento no hay cumplimiento efectivo la Ley de Parto Humanizado.
ESTEREOTIPOS, LA POLÍTICA DE LA OPRESIÓN
En contraposición al sistema patriarcal, las mujeres buscan erradicar el sometimiento físico, psicológico, simbólico, sexual, económico y patrimonial, que se traducen en la imposición de estereotipos que cercenan las libertades femeninas.
A esto se le sumó el rechazo al proyecto de “ley de libertad religiosa” que impulsa el Poder
Ejecutivo Nacional para que las religiones tengan aún mayor injerencia en el ejercicio de los derechos ciudadanos y lo público.
Con la fuerza de una multitud de mujeres que lucha y forja este encuentro contrahegemónico, las voces femeninas confluyen durante tres días en Resistencia para poner punto final a la violencia machista y el avasallamiento de los derechos de las mujeres.
