La ex detenida política Mirta Clara de Sala falleció cerca de las 7 de la mañana de hoy, en Buenos Aires. La noticia sumió en la tristeza a todo el colectivo de DDHH, que la despidió con sentido reconocimiento a su entereza humana, con una impronta solidaria y activa. Y es que Mirta Clara fue una luchadora de toda la vida; militante montonera, sufrió la persecución, torturas y ocho años de cárcel durante el terrorismo de Estado.Era oriunda de la ciudad de La Plata pero fue detenida junto a su su compañero, Néstor “El Flaco” Sala (fusilado en la Masacre de Margarita Belén) en Resistencia, en octubre del año 1975, y confinada en el centro clandestino que funcionó en la Brigada de Investigaciones de la Policía del Chaco. Recobrada la democracia, Mirta fue una “imprescindible” en la militancia por el Juicio y Castigo a los genocidas de la región, presente en cada marcha y en cada homenaje el 13 de diciembre a los asesinados en la Masacre. Fue una de las principales impulsoras contra las leyes de impunidad en todos los frentes. Una carta suya en 2003 al entonces presidente Néstor Kirchner, denunciando la ignominia de tener a uno de los represores del fusilamiento clandestino como agregado militar en Italia derivó en el cese en funciones del denunciado, Horacio Losito, que fue dado de baja y hoy purga sendas condenas a perpetua por su participación en la represión.
Ya con los juicios en curso, el testimonio de Mirta en las causas por crímenes de lesa humanidad fue uno de los puntales para la formulación de las condenas a la par que un alegato político de cómo funcionó el exterminio perpetrado contra las organizaciones populares durante la última dictadura cívico militar. En esta militancia por la Memoria confluyó también una activa militancia por la salud mental y el respeto de los derechos humanos de usuarios y pacientes. Su última visita al Chaco fue en el marco de los homenajes por los 30 años del Mural de Amanda Piérola, “Margarita Belén Dolor y Esperanza” junto con Horacio Vertbisky, dónde convocó a seguir sumando energías al avance en las respectivas causas judiciales, y asimismo, avanzar en más y mejores derechos y libertades para todos y todas.
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