La abuela de Dylan, María Rosa Marquesini, comentó a elDIARIO de la Región: “Nos asentamos aquí el 5 de septiembre y permanecimos hasta el 12, cuando fue localizada la madre y mi nieto en el interior provincial. Luego hicimos una audiencia y volvieron a reintegrar al menor”, sostuvo y lamentó que la Justicia: “No haya cumplido con las órdenes judiciales impuestas por el Juzgado N° 3 y no se hará respetado las visitas al psicólogo”.
“Todo continúo como si no pasó nada, como si se hubieran cumplido todas las ordenes impuestas, desconocen un acuerdo de partes realizado este año con visitas supervisadas para la madre, una resolución impartida por la Juez de Garantías N° 3, pero hoy lo reparten como si el problema fuera de pareja”, enfatizó.
Marquesini explicó que se impuso una medida de protección de persona hace dos semanas que “hoy no se respeta” y obligan a su hijo Marcelo García, padre de Dylan, “a cumplir el régimen provisorio impuesto el año pasado”. “Hay una cuestión de fondo sobre la integridad física del pequeño que sufrió abusos desde los tres años y no lo escuchan ni lo protegen”, remarcó.
Asimismo, María afirma que el señalado como supuesto abusador, la actual pareja de Gilda Melina Cortés (madre de Dylan), un oficial de Investigaciones, Juan Marcelo Ramírez: “Se encuentra en libertad y sigue con su vida” y aseguró que su hijo “es perseguido por la Justicia”. “Hay cuestiones que no entiendo, no protegen al niño y no nos queda otro remedio que hacer publica nuestra cuestión, en los juzgados existe el problema en el entendimiento y aplicación de las leyes y en la protección de los niños que no pueden expresarse”, declaró.
Por último, pidió a la justicia que: “Escuche a los psicólogos y que analicen los informes, tienen un equipo interdisciplinario y sale a la luz que no cumplen con sus funciones”.
EL CASO
El conflicto se desató cuando Melina Cortés denunció ante la Fiscalía N° 6 que el 7 de julio tuvo una audiencia en el Juzgado del Menor de Edad y la Familia, donde su expareja, Claudio Marcelo Javier García, debía hacer entrega de su hijo, pero que el padre del menor no cumplió con la orden judicial.
La situación fue desmentida por García, quien acusó a su expareja de ser cómplice de los abusos y maltratos contra el menor por parte de su pareja.
Desde allí comenzaron el trajín en los juzgados y las manifestaciones frente al Superior Tribunal de Justicia para reclamar “la negligencia de la Justicia” en la causa que denunciaron el supuesto abuso sexual y maltrato del menor.
