El ministro de Justicia, Germán Garavano, y el presidente, Mauricio Macri, enviaron una nota al Senado solicitando el retiro del pliego de Alan Iud, abogado de las Abuelas de Plaza de Mayo. El profesional había ganado un concurso en 2014 para convertirse en fiscal y esperaba la aprobación de la Cámara alta.
El presidente de la Comisión de Acuerdos, el senador del PJ, Rodolfo Urtubey, aclaró al medio que hizo público este hecho inédito, Página/12, que no había “objeciones a la idoneidad del candidato” y que su aprobación estaba garantizada. Esto develó que se trató de una maniobra impulsada, en soledad, por el Poder Ejecutivo.
En diálogo con el diario nacional, Iud contó que desde el Gobierno le comentaron informalmente que no había acuerdo con un sector del peronismo, pero que a él le cuesta creerlo. “Las razones sólo pueden tener que ver con mi trabajo en Abuelas”, señaló.
“Mi pliego ya había sido evaluado por este Gobierno y mi perfil profesional es muy claro. Desde que enviaron mi pliego al Senado en octubre del año pasado hasta ahora que decidieron retirarlo, no cambió nada”, confesó el abogado, quien dijo sentirse sorprendido. Aunque, relató que sus “intervenciones públicas más relevantes en mi trabajo en Abuelas este año tuvieron que ver con el rechazo al 2×1 aprobado por la Corte Suprema y que beneficiaba a detenidos por delitos de lesa humanidad”.
En este sentido, aseguró que las razones de este rechazo sólo pueden tener que ver con su trabajo en Abuelas. “Desde el Gobierno, me hicieron saber que había resistencias en el peronismo con mi pliego, pero me cuesta creerlo. Más bien pienso que se impuso un sector allegado al Gobierno que está en contra de que avancen los juicios de lesa humanidad y las políticas de derechos humanos”. Sobre el apoyo que recibió de Estela de Carlotto, dijo que “es un gran honor contar con el apoyo de Estela y las Abuelas”. “Significa que estos años hice bien mi trabajo y es lo que más tranquilo me deja”, indicó.
Si bien confía en los pasos formales que aún puede hacer, explicó: “El Senado podría rechazar el retiro del pliego y darme acuerdo, pero la última decisión seguiría siendo del Gobierno, porque deben promulgar el acuerdo del Senado. Si eso pasa, bienvenido, y si no, seguiré trabajando por los derechos humanos desde donde me toque”.
